Pensamos que todos nuestros actos son consecuencia de algo.
Por otra parte, creemos que también existe una discontinuidad dentro de una continuidad. La hipótesis a la que se refiere en el texto citando las distintas etapas coincide con nuestra propia vida, son las que hemos vivido y nos quedan por vivir.
Obviamente hay que diferenciar entre unas edades y otras ya que no podemos tratar a un niño de ocho años como a uno de veinte, no podemos exigirle los mismos conocimientos, ni la misma madurez, ni la misma responsabilidad.
Podríamos llegar a la conclusión de que cada etapa tiene un momento específico en nuestra vida, unos acontecimientos que toman pie, y unas decisiones que tomar ; aun así quedan muchos campos abiertos como los que menciona el texto de la diferente legislación que desarrolla cada país , aludiendo a la edad con la que prohíben comprar tabaco y bebidas alcohólicas.
En mi opinión, es complicado determinar si existe una continuidad o una discontinuidad en el desarrollo. Yo pienso que adquirimos habilidades, aprendemos y tenemos un desarrollo de forma continua. Sí bien, lo hacemos progresivamente, por lo que existe cierta controversia. Por tanto, yo diría que existen diferentes discontinuidades en la continuidad.
ResponderEliminarIgnacio Fernández Balboa, grupo B3.
Habláis de la discontinuidad y, por tanto, de las etapas del desarrollo, pero no tratáis el tema de la continuidad.
ResponderEliminarUn saludo,
Ana Belén